Depende de cómo se presente en el sueño. Si la ves desenrollada indica que estás intuyendo una nueva actividad que implica mucho trabajo por delante. También suele ser presagio de complicaciones si en el sueño te ves buscando la punta de la madeja y no la encuentras.

Estas flores representan la exquisitez y la belleza, así como los modales delicados. Por esto, muchos autores interpretan su aparición en los sueños como un anhelo de incorporar una mayor armonía en nuestra vida, o el deseo de cambiar de ambiente social buscando siempre un mayor refinamiento.

Verla venir significa que temes se te acumulen los trabajos, las responsabilidades, pero si en el sueño estás dentro de la manada es presagio de que recibirás en un asunto importante, una ayuda mayoritaria.

Verlo en el sueño es buen presagio de que podrás superar tus dificultades y encontrar la salida a tus problemas. Si alguien te lo enseña querrá decir que alguna persona cercana te enseñará el camino con sus buenos consejos.

En forma general simboliza las dificultades que deberemos superar para lograr nuestros más altos objetivos. Será importante por lo tanto, observar si en el sueño vamos acompañados y si estas compañías nos ayudan a seguir adelante o nos retrasan en el camino de ascenso. Llegar a la cima será un buen augurio, y perdernos en el ascenso, síntoma de confusión y desorientación sobre el verdadero alcance de nuestros deseos.